marzo 12, 2006

Responde el Mtro. Rodolfo Rodrìguez Bojorquez a Fernando Mier y Teràn Director del ITCA

CARTA DE PROTESTA

Ciudad Victoria, Tamaulipas, a 9 de enero de 2006.

LICENCIADO FERNANDO MIER Y TERÁN GARZA
Director General del Instituto Tamaulipeco para la Cultura y las Artes.

Por este conducto me dirijo a usted para saludarle, desearle un buen año y darle a conocer algunas situaciones que se han presentado. Como recordará, en el año 2000, la entonces Orquesta de Cuerdas de Tamaulipas, pasó a ser Orquesta Sinfónica Juvenil de la Casa del Arte, misma que por aquel entonces estaba bajo mi dirección y que no contaba con repertorio sinfónico, coincidiendo esto con el montaje de la obra “Reso” del señor Medardo Treviño, quién sostenía una fuerte polémica con los teatristas de la entidad que lo acusaban de autobeneficio; al no querer verme yo afectado por acusaciones similares, decidí conseguir, a titulo personal y por medio del doctor Fernando García Torres, entonces Director General del Sistema Nacional de Fomento Musical de CONACULTA, gran cantidad de partituras que me ayudarían en el trabajo con la recién ampliada orquesta, estas partituras no las proporcionó el SNFM de manera gratuita, yo pagué con mis recursos aproximadamente dos mil ochocientos pesos, y no fueron entregadas al ITCA sino a mi persona, por lo que estas copias son indiscutiblemente de mi propiedad. Sin embargo, en el mes de septiembre de 2004, yo deje de dirigir esta agrupación, pero las partituras continuaron en los archivos de la Casa del Arte, pues yo no las ocupaba, pero el pasado mes de mayo le solicité al ingeniero Armando Cavazos, Director de la Casa del Arte, me permitiera el acceso a los archivos para retirar las partituras en cuestión, autorizándolo sin mayor objeción y yo las retiré bajo la observación del maestro Manuel González Isás. Desgraciadamente este hecho suscitó un sin fin de dimes y diretes entre los miembros de la orquesta, pero que yo aclaré oportunamente con algunos de los músicos afectados, haciéndoles saber que las partituras, aunque ya no las tendrían ellos, seguirían a su disposición, bastaba con pedirlas, yo las proporcionaría y asunto arreglado; pero, ¿cuál sería mi sorpresa? que al inscribirme al taller, encuentro, curso o como se le haya nombrado al evento que el ITCA “organizó” del 6 al 10 de diciembre pasado, la licenciada Belen Liceaga, Jefa del Departamento de Difusión Cultural, me acusó públicamente de haber robado las partituras de archivo de la Sinfónica Juvenil, pretendiendo condicionar mi participación a cambio de la devolución de las partituras que, como ya he dicho, me pertenecen. Pero dicha condición no prosperó y, para mi infortunio, me inscribí a tal evento en el que la licenciada Liceaga siguió diciendo a los alumnos que yo era un ratero, pero el colmo llegó cuando los propios instructores del SNFM me informaron que también esta “funcionaria” les dijo que tuvieran cuidado con sus objetos personales y que además yo era una persona peligrosa. Inmediatamente después de que me enteré de esto, busque al señor Medardo Treviño, Director de Fomento Cultural, para ponerlo al tanto de esta situación, pero no lo encontré por lo que él tuvo la atención de enviar al licenciado Astolfo Palomo a atenderme y fue a él que le hice saber lo ocurrido, asegurándome que hablaría con el señor Treviño para informarle de los bochornosos sucesos, pero el día 10 de diciembre, cuando se daría el concierto de despedida del evento, no tenía yo ninguna respuesta del señor Treviño y ninguna disculpa de la licenciada Liceaga por lo que de nueva cuenta hable con el licenciado Palomo haciéndole saber mi inconformidad y pidiéndole me informara cual era la postura del ITCA ante una funcionaria que difama a los artistas, pero como no tuve respuesta alguna y no podía pasar por alto un hecho tan relevante que afectaría mi relación de más de 12 años con el SNFM desde que este se denominaba Orquestas y Coros Juveniles de México, ni podía permitir que casi 30 años de trayectoria musical se mancharan de una manera tan burda, me ví en la penosa necesidad de exponer públicamente, ante los estudiantes y maestros del curso, las autoridades del ITCA, del SNFM y el público asistente, cuales eran los antecedentes y los hechos suscitados. Estaban los maestros que me informaron lo que la licenciada Liceaga decía de mi persona, los alumnos ante quien me tachó de ratero, el ingeniero Cavazos que me autorizó extraer mis partituras de la Casa del Arte y muchos más testigos de la campaña que esta señora realizó en mi contra, y cuando yo tomé la palabra y mencioné lo sucedido, nadie se paró a decir “no es cierto lo que usted está diciendo maestro, yo no le dije nada”, por el contrario, hubo quienes asintieron con la cabeza. Y esto sucedió porque sólo hable con la verdad. Hoy, a un mes de estos lamentables hechos, sigo sin saber cual es la postura oficial del ITCA ante los funcionarios que difaman a los artistas, me parece que un mes es más que suficiente, pues cuando ha sido al revés, cuando un artista ha dicho algo en contra de un funcionario, la respuesta no se ha hecho esperar, como se dice cotidianamente, se han defendido como gato panza arriba. Usted sabe perfectamente, pues no me escondo, que yo soy uno de los firmantes de aquella famosa carta en la que 100 artistas lo desconocíamos como autoridad cultural, pero, por motu propio, decidí distanciarme de ese movimiento, pues me traía desgaste y me distraía de mi actividad artística, además usted declaró llevaría una política cultural de apertura para todos los artistas, inconformes o no con su gestión, pero veo con tristeza que esto sólo fueron palabras y demagogia, y que no me equivoqué al firmar aquella carta, pues en lo que a mi respecta, no sólo he sido victima de calumnias, sino vetado de las actividades musicales que organiza el ITCA ya que, hasta donde yo sé, se organizó un taller de dirección orquestal en Tampico, impartido por el maestro Arturo Quezadas, un congreso de pedagogía musical en el mismo municipio, un curso de rítmos de huapango realizado el Ciudad Victoria e impartido por Evaristo Aguilar, y el pasado diciembre un encuentro de orquestas al que asistieron los mejores músicos del estado a decir de la licenciada Liceaga; sin embargo, de todo esto me he enterado por terceras personas, porque por parte del ITCA no he recibido información alguna, pero cuando algo ha sido del interés del ITCA, me han hablado por teléfono e incluso me han buscado en mi domicilio. En realidad no me afecta no asistir a los eventos que se han realizado, pero tengo alumnos en las dos orquestas que actualmente dirijo, que bien podrían haberse beneficiado, pero el veto -porque no se le puede llamar de otra manera- del que soy objeto está afectando a un gran número de jóvenes músicos que no ven, de ninguna manera, la política de apertura de la que usted y el señor Treviño tanto han hablado. Sin más que tratar por el momento, sólo me resta despedirme de usted esperando una pronta respuesta y me llegue información de los eventos que realice el ITCA para poder transmitírsela a mis alumnos.

A T E N T A M E N T E

Mtro. Rodolfo Rodríguez Bojorquez

c.c.p. Ing. Eugenio Hernández Flores, Gobernador Constitucional de Tamaulipas
c.c.p. Lic. Homar Zamorano, Secretario de SEDESOL
c.c.p. Archivo personal

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