diciembre 07, 2008

MILENIO "La cultura vaga en Tampico"




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Para bajar recursos, ahí están educación y cultura, declaró

A los funcionarios de cultura, dijo Amparo González Berúmen, les falta conocimiento en el área. Hay quienes ni siquiera saben quien es el artista cuando ya tiene 30 años de obra.



2008-11-29•Locales


Por: Marisol Vera


Amparo González Berumen, empresaria exitosa que habla de su experiencia en la cultura FOTOS: JOSÉ LUIS TAPIA
El olor a café llega hasta la calle, se escapa entre las rendijas de las ventanas, por debajo de la luz como un presagio. El anuncio nostálgico de El Cuco se levanta sobre la mañana.

El rugido de las máquinas inunda los laberintos de puertas y paredes. Entre imágenes colgadas del tiempo, Amparo González Berumen, se dispone a conversar sobre su experiencia como mujer empresaria amante de la cultura

¿Cuál piensa que fue el motivo principal de que la AMMJE le nombrara la empresaria del año 2008?

Fue, sobre todo, por mi acercamiento a la cultura y en lo que respecta a este año por el concepto de Café Degas. Hasta ahora existen cuatro sucursales y planeo abrir una más a finales de febrero del próximo año.

¿Cuál es la clave para que la cultura sea un negocio, o al menos autosuficiente?

La cultura, jamás la he visualizado como negocio. Estamos cumpliendo 11 años con el Café Cultura y nuestro objetivo principal es hablarle a la gente. El Café Degas ha tenido mucha popularidad entre los jóvenes, y se han abierto varias sucursales, pero estas cafeterías tienen sólo un año y mi interés por la cultura viene de más atrás.

¿Qué nuevos proyectos tiene Ediciones Café Cultura?

Hemos editado cuatro libros, entre ellos Los días perdidos y otras pérdidas, de Arturo Castillo Alva, libro con el que inauguramos la editorial, y el más reciente An Tenec Cau, diccionario de la lengua huasteca, de Epifanio Martínez Hernández. Están en proyecto 4 libros, entre ellos un libro de historietas escrito por Arturo Castillo e ilustrado por José Luis Díaz, y el libro Historia tampiqueña de la infamia y otras historias, de Aurelio Regalado.

¿Cómo está afrontando la crisis económica actual la empresa Café Costeñito?

De manera local no ha afectado tanto la crisis. Se vislumbra bueno el año en cuanto a producción de café. Pero podría afectarnos en los insumos, las cafeteras son italianas, tenemos muchos accesorios que compramos en Estados Unidos, de manera que ahí es donde vamos a resentir. Ahora que con el desempleo que se viene, no creo que vayamos a tener ese problema.

¿Ustedes tienen plantíos de café, en dónde están ubicados, cuántos son?

Tenemos plantíos en la Huasteca, en Xilitla. Pero nuestro abastecimiento es muchísimo más grande. Son fincas cafetaleras, pero en realidad no somos una empresa grande, quizá chica entre las medianas. Compramos café de diferentes regiones, por ejemplo Veracruz y Chiapas.

¿Cuál es su opinión acerca de cómo se está haciendo la cultura en el sur de Tamaulipas?

A los funcionarios, algunos, les falta conocimiento en el área. Hay quienes ni siquiera saben quien es el artista cuando ya tiene 30 años de obra. Quizá sea la ausencia de estar ellos en el ámbito de la cultura. Quizá sus decisiones no sean tan atinadas y no se destinan fondos suficientes. Quizá está vagando en el ambiente el programa de cultura aquí en Tampico. Pero en relación a hace 10 años, veo un florecimiento cultural.

¿A qué cree usted que se debe este florecimiento cultural?

La unión de esfuerzos hecha por asociaciones promotoras de la cultura, por ejemplo yo por mi cuenta con el concepto Café Cultura. También ha sido valiosa la inauguración del teatro, porque nos permite apreciar espectáculos internacionales, lo de los costos es un reglón serio que también hay que tratar. De pronto quisiera escuchar que un escritor de los nuestros levantara la mano y dijera “voy a impartir un taller, que vengan los jóvenes, pongan el marco y yo lo imparto”.

Pero sí hay escritores que han impartido cursos gratuitos en Tampico.

Bueno, siempre hay mucho reclamo de parte de algunos artistas, se quejan de mil cosas y tienen razón, pero tú cuando hablas es porque ya diste lo que estás exigiendo.

El presupuesto de Tamaulipas destinado a la cultura fue uno de los más bajos en el país, dado que no presentó proyectos, ¿cuál es su postura sobre esta situación?

Definitivamente el presupuesto que tenemos para la cultura, por parte del gobierno, es nada. Pienso que el artista puede tener espíritu creativo, pero no siempre sabe como presentar un proyecto. Quizá no puedes sustentar un gran currículum porque antes tuviste cosas que realizar y nunca llegaste a hacerlo porque no tienes apoyo.

¿Qué sucede, entonces, con la responsabilidad por parte de los gobiernos para apoyar a los artistas?

Es una responsabilidad que no cumplen, que no se está cumpliendo ahora, ni atrás, ni más atrás. Esta situación es a nivel nacional. La dinámica también es estatal y municipal. El presupuesto para la educación también es muy bajo. Cuando se trata de bajar los recursos, inmediatamente ahí van la Educación y la Cultura. Yo no sé si quieran que seamos un pueblo ignorante y no levantemos la mano para reclamar puesto que no sabemos nada.

En lo que respecta al Megaproyecto, usted habló en defensa de nuestras áreas verdes en la Laguna del Carpintero, ¿cuál es su postura en este momento acerca de este rubro?

El Megaproyecto definitivamente era un grave error. Es un gozo que no se haya realizado, no en la cuestión global porque comprende varias etapas, pero específicamente en la etapa del centro comercial que se pretendía realizar ahí en casi 20 hectáreas. Aparte de la complejidad de lo político, yo creo que fue la voluntad ciudadana que se dejó oír, no política, ni de los partidos, que eso también estuvo ahí revuelto.

En este momento el alcalde no tiene ninguna intención de seguir con ese proyecto. Incluso hubo un texto que publiqué, que yo dirigía en la parte final al gobernador. Mi labor fue fundamental en el asunto de la Laguna del Carpintero. Fue definitivo porque yo puse una carta abierta dirigida a la opinión pública, firmada por mí misma, y ahí empezaron todas las reacciones. Lo que ahora sí se pretende es hacer algún parque, algún aviario, un jardín botánico.

Lo que esperaríamos es que se liberen los terrenos de esa multa que quedó del trienio pasado, de dos millones de pesos, ojalá el alcalde pronto pague esa multa y entonces sí, que el municipio entre con el pie derecho y nos diga a los ciudadanos de qué forma podemos apoyar. Yo estoy dispuesta a invertir, sin importar que partido esté en el Gobierno.

¿Más empresarios de la zona deberían apostarle a la cultura y a la ecología?

Definitivamente. A veces el empresario no voltea a ver las necesidades de la ciudad y nosotros debemos destinar un tiempo importante y un presupuesto para beneficio de la ciudad.

¿Cómo logra unir sus esferas de mujer empresaria, mujer amante de la cultura, mujer con una familia?

Nunca he podido contestar a esa pregunta. La dinámica de la empresa es toda la mañana. La labor cultural es por las tardes. Mis textos del periódico los hago en la madrugada. Es un poco repartir el tiempo, no duermo mucho, unas cinco horas. Somos una empresa familiar y de alguna manera la familia está en comunicación.

¿La empresa familiar tiene futuro en el mundo globalizado actual?

Sí. Para los hijos tener una empresa familiar es tener un camino ya andado. Ya los estamos guiando por una cultura del trabajo. Yo sí le apostaría como en un 60% a la empresa familiar.

¿Qué recomendación le haría a una mujer joven que se interese por los negocios y la cultura?


Que se reconozca a sí misma porque nuestra cultura universal, de la que ni siquiera me interesa hablar con relación al papel de la mujer, ha tenido muchas mujeres que piensan que no son capaces de realizar tal o cual tarea. Uno de los aciertos de nuestra empresa es que todas las mañanas estamos probando las mezclas de café, es el punto de partida para luego irle a preguntar a la gente qué opina, tenemos degustaciones y estudios de mercado. Yo entro a formar parte de esta empresa e implemento cosas nuevas, pero ya estaba con cierto cauce.

¿En México tomamos mucho café?

No, en México más bien somos refresqueros. Yo adoraría que tomáramos mucho chocolate, que fuéramos de una cultura chocolatera. Por ejemplo nosotros traemos café de Oaxaca y nos mandan también chocolate hecho en casa.

Si usted fuera directora de Cultura del Estado, ¿qué propuestas haría?

Lo primero que diría es que yo nunca voy a ser directora de cultura. Empezaría por enterarme, porque luego los funcionarios ni se enteran de cuales son las necesidades de la gente. Empezaría por el apoyo a los creadores. Rescataría nuestras lenguas maternas, el náhuatl o el tenek.

¿Y si fuera directora de cultura de Tampico?

Rescataría el IRBA y ahí empezaría a desarrollar un programa. Inducir a los niños a la lectura. La lectura es como la salvación. Hacer un estudio para saber que opinan los artistas, acercarse al consumidor de arte. Muchas veces lo que pasa con los programas estatales o municipales es que las cosas se hacen porque anotaron en el programa que se iba a hacer, para ponerle el sellito de que ya lo hicieron, pero falta más de conciencia y conocimiento.


¿En esta administración actual se adolece de este conocimiento?


Algunas cosas, por ejemplo, yo veo la labor del patronato de lectura, se me hace bueno, pero luego redunda en las mismas personas, está haciendo falta que el tramo sea más largo, que vayan y vean de verdad hasta el último salón de las escuelas, que hagan convenio con los directores; sí se está haciendo, pero muy poco.

¿Cuáles han sido los aciertos de esta administración en cultura?

El programa de las bibliotecas es nacional, por ejemplo lo recibió la dirección del METRO, y quizá uno de los aciertos haya sido implementarlo, pero no fue una idea del municipio. Tiene su mérito porque te puede llegar una propuesta nacional y no hacerle caso. Sería eso y ¿qué más?, otro acierto no sé.

¿Cuáles son sus escritores tamaulipecos preferidos?

Me gusta mucho la letra de Gastón Alejandro Martínez, definitivamente Arturo Castillo, con él inauguré la Editorial y las veladas literarias; Juan Jesús Aguilar Orlando Ortiz, Gloria Gómez.


¿Cuál debe ser la participación de los artistas con el gobierno municipal?


Un artista tiene el conocimiento, pero no pienso que podría ejercerse en cuestión de administración, porque a veces son muy viscerales y tienen sus tendencias personales. Quizá el perfil de un funcionario de cultura es que tenga conocimiento de una realidad, la sensibilidad por el arte, don de gentes, apertura.

¿Y hemos tenido a un funcionario con estas cualidades en Tampico?

Sí lo hemos tenido, quizá no ideal, pero sí una aproximación. Ha habido buenos y malos funcionarios, aunque pienso que han sido más los desaciertos, sin duda.

¿Como mujer empresaria y activista, qué le sugiere al Municipio de Tampico?

Como se lo dije al alcalde en algún momento, que a la hora de conformar su equipo de trabajo no perdiera de vista a la gente. Porque son tan fríos los gobernantes que sólo ven proyectos. Que piensen en el espíritu de las personas. Que hicieran el parque de la Laguna del Carpintero, fortalecer el Festival Tamaulipas, debe tener como meta llegar a más gente.

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