septiembre 26, 2006
El 5inco de Tamaulipas "ITCA olvida homenaje que prometió al “Compadre Gallo”
[24-09-2006]
Por Jaime Luís SOTO.
El Instituto Tamaulipeco Para la Cultura y las Artes de la manera más cruel se “olvidó” del muy merecido homenaje que se le haría desde noviembre del 2005 a Don Damián Zapata Tovar, el famoso Compadre Gallo, por sus 68 años como músico de la Banda del Gobierno del Estado.
Mientras el ITCA que dirige Fernando Mier y Terán se la pasa homenajeando a artistas que nadie conoce y repartiendo becas presuntamente a sus amigos, don Damián espera con paciencia ese homenaje.
Pero solo ha recibido falsas promesas de una tal Nila Sarno, funcionaria del ITCA quien a mediados del año pasado le prometió a don Damián que en noviembre –del 2005- por fin le reconocerían toda la vida que le dedicó a la música.Pero ha pasado el tiempo y no se ha hecho la ceremonia.
Puros pretextos le han dado al extraordinario músico quien nació el 27 de diciembre de 1918 en el rancho San Rafael, municipio de Llera.
Cuando tenía 20 años de edad, el primero de noviembre de 1938, decidió ingresar a la Banda de Música del Gobierno del Estado y en todos estos 68 años ha visto con tristeza como muchos de sus viejos compañeros partieron de este ingrato mundo.
Don Damián es inconfundible pues nació con un defecto en los pies y hoy se apoya en su fiel bicicleta para no caerse. No quiere usar en publico bastón ni mucho menos sillas de rueda.
Tiene 88 años de edad y ya poco oye.
Entrevistado en su humilde hogar en la colonia Mainero, el Compadre Gallo exclama muy seguro de si mismo que si Dios le diera la oportunidad de volver a nacer pediría de nueva cuenta ser músico.Por el defecto en sus pies comenzó a caminar hasta los cinco años de edad con unos huaraches hechizos que su padre le fabricó.
“Empecé a caminar ya muy grandote y vieras que caídas tan feas me daba pero me levantaba de nuevo y me volvía a caer, así anduve mucho tiempo hasta que pude andar por mi mismo”, dice.Para entonces, el niño Damián ya comenzaba a mostrar su tremendo gusto por la música y con una vara simulaba tocar un violín o con sus manos hacia como que tocaba la trompeta. Eran los primeros pasos de quien hoy es un gran músico.
“A mi de plano lo que mas me llamó la atención fue la trompeta y la toque casi toda mi vida pero tuve que dejarla porque por el mismo esfuerzo se me echo a perder mi dentadura”, afirma mientras le enseña al reportero su placa dental postiza.
No le quedó más remedio que dejar su amada trompeta y ahora se dedica a tocar la tuba.
El Compadre Gallo parece emocionarse cuando se sumerge en los recuerdos y cuenta aquellas nostálgicas noches de los años cincuenta cuando se amanecía tocando en los inolvidable bailes en los Salones Alianza.Fue integrante de los legendarios Príncipes del Swing y de otras orquestas.
“Nunca olvidaré aquellas bonitas noches, la gente iba a bailar no a andar haciendo escándalo como los chamacos de ahora, había mucho respeto y siempre me acuerdo de mis compañeros Nelson Zamora, Antonio Hernández Galarza, Rudy Varela entre otros”.
Una costumbre de aquellos bailes era que primero las parejas tenían que darle una vuelta entera a la pista y entonces sí, a darle duro a la bailada.
Un dato curioso es que don Damián jamás de los jamases aprendió a bailar, por su defecto en los pies, pero era feliz tocando para la gente que hasta el amanecer bailaba su música.Son tiempos irrepetibles, que nunca volverán.Actualmente el Compadre Gallo vive solo y su pensión es de apenas mil 400 pesos por quincena. Por desgracia, se ve que la pobreza siempre lo ha acompañado, como la música.
Cada mañana, es común ver a Don Damián avanzar despacio pero firme con su bicicleta rumbo a los ensayos de la Banda del Gobierno del Estado. Pero antes se come unos tamalitos y un café en un puesto del boulevard Praxédis Balboa.Poco después del mediodía regresa a su humilde hogar donde se refugia todas las tardes entre los recuerdos de Los Principies del Swing y los bailes hasta el amanecer en los salones Alianza.En noviembre del año pasado, pocos días antes del homenaje que supuestamente le haría el ITCA, este reportero platicó con el Compadre Gallo. Sin exagerar, era el hombre mas emocionado del mundo, tenia mucha ilusión de que por fin se le reconociera su carrera musical.
Pero apenas el viernes pasado, Don Damián soltó una pregunta: ¿Tú no sabes porqué no me han hecho mi homenaje….?La respuesta la tienen los insensibles funcionarios del ITCA.